TOP 5: Pintxos en Egia
- Comer y beber
- 27 Feb 2019
Teníamos una gran deuda pendiente. Después de haber recorrido la Parte Vieja, el Centro Amara, Gros y Antiguo en busca de sus mejores pintxos, era más que obvio y necesario visitar uno de los barrios más carismáticos de Donostia - San Sebastián; Egia “donde reina la alegría” y últimamente muchas cosas más…
Egia se ha convertido en referente cultural y artístico de la ciudad por numerosas razones. Lugares que estuvieron siempre, como Le Bukowski y Gasteszena, y otros nuevos como Dabadaba o La Farandula ofrecen casi a diario actividades culturales. Conciertos, teatro y todo tipo de eventos. La apertura en 2015 de Tabakalera, centro de cultura contemporánea, terminó de poner la guinda al pastel.
Sin embargo, lo que más nos gusta de Egia es que, a diferencia de otros barrios que se ponen de moda, ha conseguido con mucha maestría mantener intacta la personalidad de barrio de toda la vida, su identidad euskalduna y ese eco de barrio obrero.
Como era de esperar en lo referente a oferta gastronómica no se han quedado atrás. Para nuestro itinerario de hoy, seleccionamos algunos locales con historia y algunas nuevas apuestas, a modo de ejemplificar esa buena mezcla de antiguo y nuevo que han sabido cocinar tan bien los egiatarras.
KM0
Pan ácimo en rollo, hummus casero, lechuga, tomate, mayonesa vegana y bola de falafel con curry
Km. 0 es un restaurante vegano-vegetariano en el Paseo Duque de Mandas, justo frente al imponente edificio de Tabakalera. El local es amplio pero acogedor. Múltiples lámparas que cuelgan del techo y se ciernen sobre el comedor creando un ambiente relajado para cenas y comidas. Iñaki, profesor de cocina y dueño del restaurante, nos explica los orígenes del restaurante. “Aunque abrimos hace cuatro años, la idea surgió hace siete durante un viaje que realicé. Visité un comunidad de filosofía vegana donde pude observar que aunque no necesariamente curada la gente salía muy mejorada. Y yo, que ya por aquel entonces casi había abandonado el consumo de carne y pescado, decidí dar el salto y abrazar el veganismo. De ahí a querer ofrecerlo a los donostiarras sólo había un paso”
Su filosofía es sencilla y universal, dar de comer bien. Con una carta en un 95% vegana sorprende saber que “Casi todos los productos son nuestros, lo hacemos todo nosotros excepto el pan”
Optamos por uno de sus durums; pan ácimo en rollo, hummus casero, lechuga, tomate, mayonesa vegana y bola de falafel. Como aderezo escogemos curry pero también se puede optar por picante, garam masala o no añadirle nada. A gusto del consumidor.
Cafetería Atotxa
Tartaleta de hongos, con jamón ibérico y salsa de roquefort
Inaugurado en 2003, casi a la par de la plaza Teresa de Calcuta donde se ubica, la cafetería Atotxa ofrece una carta de comida casera en un ambiente moderno. Sus clientes, como en el resto de los locales de la plaza, son una mezcla de vecinos de la plaza y trabajadores y visitantes del muy cercano juzgado de la ciudad.
El pintxo estrella de la carta es como cabría de esperar el que lleva su nombre, el pintxo Atotxa. Tartaleta de hongos, con jamón ibérico y salsa de roquefort, todo ello adornado con puerro frito, vinagre de módena y unas bolitas de pimienta.
Aunque Itziar, la camarera que nos atiende, nos explique que su cocina es “convencional”, lo cierto es que este bocado nos parece más bien algo excepcional. Ingredientes comunes sí, pero combinados y escogidos de forma perfecta.
Tribuna Norte
Tosta de jamon a la plancha
Haciendo homenaje a la historia del barrio, donde desde 1913 hasta 1999 se ubicó la tribuna norte del ya desaparecido campo de fútbol de Atotxa, el bar Tribuna Norte es otro clásico de la muy frecuentada plaza Teresa de Calcuta. “El 23 de julio de este año hacemos 15 años aquí. Vinimos a llenar el hueco que dejó el campo y a dar vida y oferta a esta nueva zona”, nos cuenta Pepe muy simpático tras la barra. Además de explicarnos la inmensa variedad que ofrece su carta, desde sencillos minis de tortilla a unas curiosas alcachofas rellenas de bacon y gambitas, nos remarca una de las señas de identidad del local “Damos de comer a cualquier hora, no cerramos la cocina. Por eso, trabajamos mucha clientela del juzgado, salen tarde o fuera del típico horario de comidas y siempre nos tienen a nosotros como una gran opción”.
Escogemos una de sus tostas. “La hacemos a la plancha, le damos un toque de ajo, aceite de oliva de primera calidad y el jamón...bueno no tenéis más que verlo”
¡Cierto! Adjuntamos foto para que lo apreciéis vosotros mismos.
Bar Egia
Pan tostado con espárragos trigueros empanados envueltos en jamón y puerro laminado
Ascendemos la primera cuesta del barrio, la calle Egia, para en su parte más alta hacer la cuarta parada de la jornada. El Bar Egia. Una gran barra y un amplio comedor nos reciben. Gente de paso se mezcla con gente de toda la vida que juega a cartas en las mesas de madera del local.
“Empezamos hace unos 35 años. Sobre todo, servimos platos combinados, bocadillos y una gran barra de pintxos. Los viernes pintxo pote como marca la tradición...Pero sobre todo somos conocidos por nuestras tortillas.” nos remarca Antonio dueño del bar.
Lamentablemente llegamos demasiado pronto y demasiado tarde para probarlas. Son las 11:30 de la mañana y ya se han acabado las dos primeras tortillas. “Estamos ya con la segunda ronda, están preparando otras dos ahora mismo en cocina. Saldrán en un rato”.
No pasa nada. Optamos por otro de los pintxos de la barra, uno que nos ha llamado mucho la atención nada más entrar al bar; Pan tostado con espárragos trigueros empanados envueltos en jamón y puerro laminado. ¡Buenísimo!
Pero lo cierto es que nos hemos quedado con muchas ganas de probar las famosísimas tortillas “Podéis encargarlas. Hay un montón de empresas de alrededor y también muchos empleados del juzgado que nos las encargan”.
Nos marchamos con la promesa de hacer un pedido pronto...no soportaríamos volver a visitar el Bar Egia sin probar la que dicen puede que sea una de las mejores tortillas de la ciudad.
Bar Bidea
Tartaleta con base de lechuga, aguacate, piña, chatka, salsa rosa y gamba
Todo sacrificio conlleva una recompensa. Y el esfuerzo de subir la empinada calle Virgen del Carmen, una de las dos espinas dorsales del barrio junto con su gemela calle Ametzagaña, es poder disfrutar de uno de los bares con más ambiente de Egia; el Bar Bidea.
“Abrimos en el año 1982. Como simple cafetería. Dijeron que no íbamos a aguantar mucho ¡y mira! Ahora ofrecemos menús diarios, de fin de semana, el aperitivo, desayunos… ¡de todo!” nos cuenta entre risas Txomin su dueño. Y lo que comenzó como simple cafetería se convirtió en mucho más. Se formó, la que es ahora, la peña de seguidores de la Real Sociedad más antigua que existe; la Peña Bidea. “Hacemos una fiesta de la peña todos los años, la segunda semana de junio. Somos un punto de unión muy fuerte para seguidores y vecinos del barrio”.
Isa, desde la barra, nos ofrece uno de los pintxos que más sirven. Tartaleta con base de lechuga, aguacate, piña, chatka, salsa rosa y gamba. “La tartaleta la hacemos nosotros, con pan de molde al horno”, nos cuentan como curiosidad.
Antes de marcharnos nos recomiendan volver en día de partido “Esto se llena hasta los topes. El bar y la terraza en la que ponemos un televisor extra para que nadie se pierda un pase. Se forma un gran ambiente”.
Abandonamos el Bar Bidea con la promesa de volver y comprobarlo por nosotros mismos… ¡aunque eso suponga tener que subir todas esas cuestas de nuevo! Y es que un barrio tan auténtico como Egia, desde su rincón más meridional hasta el más septentrional, merece todas las caminatas, subidas y bajadas del mundo.
Y además, eso que nos ahorramos en gimnasio.
